En la búsqueda de la protección y reducción de accidentes fortuitos, la DGT apuesta por suprimir el uso del triángulo de emergencia. En caso de avería en carretera, el conductor se ve obligado a salir del vehículo para señalar la situación. Esto pone en riesgo la vida del pasajero y, para evitar eso, la DGT ha decidido modificar esta herramienta de avería en carretera para sustituirlo por una luz de emergencia. Sólo en 2019, 117 personas perdieron la vida en situaciones como ésta – en muchos casos, sin chalecos reflectantes -.

Dicha herramienta, contará con un reflector parabólico que permitirá que la luz sea visible a un kilómetro a la redonda y, un localizador GPS el cual enviará de manera automática nuestra ubicación a la asistencia en carretera en cuanto sea activada. Este dispositivo irá conectado por bluetooth a nuestro móvil y, no contará con baterías ni cables. La idea inicial de esta iniciativa es no tener que abandonar el vehículo en ningún caso, es decir, cuando suframos una avería, solo bastará bajar la ventanilla y colocar la luz de emergencia en el techo exterior del vehículo, adherido por un anclaje magnético en su base. Así se ha establecido en el Proyecto de Real Decreto del Auxilio en Carretera, el cual ha sido aprobado a lo largo del primer trimestre de 2021, para pasar a su obligatoriedad el 1 de enero de 2026. No obstante, no significa que no se pueda utilizar antes. La DGT afirma que su uso comenzará a realizarse a partir del 1 de julio de este mismo 2021. El tiempo que separa estas dos fechas, se vivirá una convivencia entre los triángulos y la luz v-16 (la avería deberá ser señalizada con cualquiera de estos).

La normativa señala que dichas luces deben estar homologadas, para ello debe funcionar mediante baterías (siendo recargables o no) con una efectividad de 18 meses en espera. Y, deberán estar aisladas mediante protección IP54 y funcionar en un rango de temperatura de entre -10ºC y 50ºC.

Ana Blanco, subdirectora adjunta de circulación de la DGT, demostraba: “Hoy por hoy, el usuario tiene que abandonar el vehículo e ir a colocar el triángulo. Es precisamente en ese momento cuando las personas se convierten en vulnerables, por lo que consideramos que es más apropiado permanecer en el vehículo sustituyendo esa preseñalización por otra”. Dicha modificación busca la seguridad del pasajero por accidentes de alcances. Así mismo, todos nos preguntaremos si es una herramienta asequible económicamente hablando. Pues bien, dicha luz homologada presenta un rango de precios no muy amplio, lo podemos encontrar desde 20€ a 50€, o 60€. Al fin de cuentas, es inversión en nuestra propia seguridad en carretera y, se podrá usar tanto con lluvia como con nieve o en circunstancias de poca visibilidad.

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