El cambio de ruedas en los coches normalmente se realiza de dos en dos ya que el gasto del neumático no es igual en la parte delantera que trasera del coche. Hoy en Miñacar os damos algunos detalles de cómo y por qué se realiza así el cambio de neumáticos.
A la hora de cambiar las ruedas de tu vehículo debes tener en cuenta el tipo de tracción que tiene. Un vehículo de tracción total debe cambiar las cuatro ruedas a la vez, para evitar que tengan diferentes diámetros que puedan desgastar el diferencial central al estar contantemente funcionando.
En el resto de las tracciones se pueden cambiar las ruedas de dos en dos, pero siempre colocando las nuevas en el eje trasero, ya que proporcionará una mayor seguridad. Los motivos son los siguientes:
- Reducimos el riesgo de aquaplaning, ya que las ruedas traseras tendrán más tiempo para evacuar el agua que pisan.
- Reducimos el riesgo de pinchar una rueda. Los pinchazos en las ruedas traseras son mucho más peligrosos porque se pierde más control sobre el coche. Al poner unas ruedas nuevas en la parte de atrás, el riesgo de pinchazo disminuye.
- Reducimos el riesgo de sobreviraje, es decir, reducimos el riesgo de que el eje trasero pierda adherencia en un giro o curva. El sobreviraje es peligroso, porque los conductores tienden a frenar cuando sucede, lo que provoca que se pierda aún más la adherencia.
- Los coches tienden a gastar más las ruedas de la parte delantera, por lo que son las que se encuentran en peores condiciones. Cambiar las ruedas traseras a la parte de delante y colocar unas nuevas atrás es la mejor alternativa.
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